Fotógrafo de boda en Alicante – Boda de Mario y Antonio

Como fotógrafo de boda en Alicante, me gusta cuando una pareja decide celebrar su historia sin filtros, con verdad y siendo auténticos. La boda de Antonio y Mario fue justo eso: cercana, bien vivida y con toda la energía puesta donde toca. Sol, amigos y muchas ganas de celebrar.

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El día arrancó en Torre de la Horadada, en la casa de verano de Mario. Aunque él es de Madrid, allí se reunió con su familia más cercana: padres, hermana, sobrino, cuñado… Un momento íntimo, al lado del mar, con esa calma que solo tienen las horas previas cuando todo está en su sitio. Luz brutal, buena compañía y el mar como fondo.

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Después nos movimos a Bigastro, el pueblo de Antonio. Cambio de ambiente, pero misma vibra: naturalidad, risas y ese ratito con los suyos antes del salto. Cervezas en la terraza, solazo de los que te cargan las pilas y un previo sin prisas, como tiene que ser.

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La ceremonia fue en Casa Antonio Eventos, en Rojales. Un sitio que ya de por sí tiene su rollo, pero que ese día se llenó de emoción de la buena. Hubo intercambio de anillos, un ritual de las arenas donde mezclaron tierra de Madrid y de Bigastro como símbolo de su unión, y un ambiente de esos que no se fuerzan: familia arropando de verdad, amigos con la piel a flor de piel y sonrisas que no había que pedir. Ser fotógrafo de bodas en Alicante en días así es un gustazo.

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Y tras el “sí quiero”, llegó la celebración como debe ser: cóctel, banquete y fiestón con animación que encajó con ellos al 100%. Nada de protocolos aburridos ni poses que no iban con ellos. Solo una pareja que se lo estaba pasando de escándalo, rodeada de gente que les quiere bien.

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Aquí debajo tienes una selección con algunas de mis fotos de ese día:

Una pequeña muestra de lo que pasa cuando se celebra desde lo auténtico. Sin filtros. Sin postureos. Solo una buena boda en Alicante, como debe ser.

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